Un dolor orofacial afecta los tejidos de la cabeza, cara, cuello y cavidad oral, dientes y la articulación temporomandibular. Es por eso que es habitual experimentar dolores de cabeza, dolor musculoesquelético, dolor originado en el sistema nervioso, dolor psicógeno e incluso enfermedades graves. Disfunción temporomandibular se puede asociar la mayor parte del tiempo. Por lo general, vienen en ciclos de dolor que se alternan con períodos de remisión.
Diagnóstico de dolor orofacial.
Debido a la participación de muchos tejidos y diferentes partes del cuerpo, el diagnóstico A menudo puede ser difícil. El dentista debe hacer un consulta larga investigación del historial médico y dental del paciente. La intensidad y el tipo de dolor debe ser muy detallado, porque cada tipo puede estar relacionado con un problema diferente y puede conducir a un tratamiento propuesto. Se realizan exámenes radiográficos y complementarios para ayudar en el diagnóstico, además de palpaciones en la cara y quijada. A menudo, el dolor se irradia a otras regiones, lo que dificulta el diagnóstico. Una neuralgia del trigémino (el nervio sensorial y motor principal en la cabeza), por ejemplo, puede causar dolor severo en el dientes y tome al dentista para tratar el canal de todos los dientes en la región o para extraerlos sin que el dolor se extinga. Por lo tanto, cuando el dolor de muelas está presente, la prueba de vitalidad es imprescindible.
Cuando se hace el diagnóstico, el tratamiento debe ser realizado por un equipo médico compuesto por dentistas, médicos, psicólogos y fisioterapeutas que usan medicamentos y técnicas específicas para la relajación y el alivio del estrés con el fin de resolver el dolor.
Áreas dentales relacionadas:
La especialidad dental más adecuada para el diagnóstico y tratamiento de dolor orofacial es el Disfunción temporomandibular y dolor orofacial.